Los padres que lloran en la almohada

¿Cuántos padres han ahogado en la almohada la sensación de impotencia ante sus hijos?
Los padres que lloran en la almohada aporta herramientas para reconducir las relaciones entre padres e hijos, para conocerlos y guiarlos no hacia vuestras expectativas sino hacia ellos mismos.
Los niños nacen desnudos y necesitados, completamente dependientes de las funciones maternas y paternas. La familia es una institución tan necesaria como el corazón, ya que alrededor de ella, sea del tipo que sea (mono parental, homosexual o heterosexual) se construye el núcleo de la personalidad y la socialización del niño. No debemos olvidar, sin embargo, que los hijos no son nuestras extensiones y que sólo se pertenecen a ellos mismos.
Las reflexiones y recursos que encontraréis en estas páginas os harán reflexionar, mirar en vuestro interior, y os darán energía y respuestas para intentarlo de nuevo. Nunca es tarde para recuperar la relación y el amor con los hijos; ellos desean lo mismo.
Helen Flix nació en Barcelona en marzo de 1959. Por cuestiones del destino tuvo la suerte de convivir con distintas tribus americanas, Hopi, Siuox, Incas, Shipibos Conibos, y de colaborar con distintas ONG en India, así como experimentar retiros espirituales en el monasterio Budista Tibetano de Gaden Shartse. Todo ello la hace sentirse ciudadana del mundo y una defensora de los derechos humanos y de la erradicación de las diferencias económicas entre el Primer Mundo y los otros.
Cursa estudios superiores entre España y Estados Unidos de Música, Medicina y Psicología y de Medicina Tibetana en Nepal, India y Tíbet, habiendo conseguido el grado de «Duramba». Es directora desde hace dieciséis años de la asociación Sun Dance y sigue haciendo de puente entre Occidente y Oriente, viajando con grupos de su asociación para vivir y aprender con otras culturas. Como escritora, lleva publicados ocho libros: Nuevos Amaneceres, Thor el Iniciado, Desde mi corazón, Galpi el chamán, Susana, la historia de una obsesión, Tratado básico de Medicina Tibetana, En India aprendí a amar, En nombre de Dios y Adiós a los miedos, también con Corona Borealis.